Crece el número de gorilas de montaña en un bosque protegido de África Central

Un censo realizado recientemente reveló el mayor número de gorilas de montaña jamás registrado en una gran franja de bosque protegido en Uganda y la República Democrática del Congo. WWF y sus socios de conservación contabilizaron 459 individuos, en comparación con los 400 que se calculaba existían en 2011, en el ecosistema Bwindi-Sarambwe cuya extensión de 83,840 acres (33,929 ha) se extiende desde el Parque Nacional de la Selva Impenetrable de Bwindi, Uganda, hasta la Reserva Natural de Sarambwe, en la República Democrática del Congo. Este es uno de los únicos dos lugares del paleta donde aún existen gorilas de montaña.

La población global total de gorilas de montaña que vive en estado silvestre ahora se calcula que es de 1,063 tomando en cuenta los resultados dados a conocer según el censo Virunga Massif 2015/2016.

“Es importante ver cómo continúa la favorable tendencia para los gorilas de montaña, especie que alguna vez se pensó podría extinguirse a finales del siglo XX", menciona Bas Huijbregts, director de especies africanas en WWF. "Los esfuerzos efectivos de conservación a largo plazo han ayudado a que las poblaciones de Virunga y Bwindi aumenten pero mantener estos increíbles resultados dependerá de mantener dichos esfuerzos".

De marzo a mayo de 2018 y de octubre a diciembre de 2018, los equipos a cargo del censo, pertenecientes a 13 instituciones participantes -incluyendo WWF-, contaron con el apoyo de los gobiernos locales y las comunidades, inspeccionaron el área forestal caminando por senderos y estuvieron observando cualquier rastro de los gorilas, otros mamíferos y las actividades humanas. Además, recolectaron muestras fecales en sitios de crianza de los gorilas para determinar la composición genética de cada individuo, información que después se utilizará en otros estudios científicos.

Los gorilas de montaña están considerados en peligro de extinción, amenazados por la pérdida de hábitat, la caza furtiva y la transmisión de enfermedades de los humanos. Aunque el censo brindó la alentadora noticia de que las poblaciones de gorilas de montaña salvajes están aumentando, también reveló que las actividades humanas ilegales continúan desenfrenadamente, incluyendo la caza ilegal. A pesar del positivo avance en cuanto a la participación comunitaria e iniciativas de conservación y turismo en el área, los equipos que participaron en el censo encontraron y destruyeron 88 trampas durante el período del estudio.

En WWF continuaremos con nuestra misión de asegurar el futuro de los gorilas de montaña apoyando al Programa Internacional de Conservación de los Gorilas (IGCP, por sus siglas en inglés). WWF y sus aliados formaron el IGCP en 1991 como una coalición de organizaciones conservacionistas para garantizar la supervivencia a largo plazo de los gorilas de montaña. Los censos para determinar el estatus de las poblaciones seguirán siendo una de las herramientas clave para medir el impacto de la conservación a lo largo del tiempo. Esperamos continuar por este exitoso camino de recuperación.