3 formas en las que Estados Unidos está adoptando medidas para proteger la biodiversidad

Estas acciones envían un mensaje al mundo, pero hay mucho más por hacer

Estamos atravesando una crisis mundial de biodiversidad. Las poblaciones de vida silvestre han disminuido 69% en promedio desde 1970, una tasa sin precedentes en la historia humana. Además, un trascendente estudio de la ONU, publicado en 2019, reveló que alrededor de 1 millón de especies ahora se encuentran en peligro de extinción, muchas en cuestión de décadas.

La ciencia exige acciones transformadoras urgentes, y hoy es el momento de asegurarlas. Actualmente, los países están reunidos en Montreal para negociar un nuevo marco global bajo el Convenio sobre la Diversidad Biológica, el acuerdo internacional para proteger la naturaleza. Hacemos un llamado a los líderes para que se comprometan con un acuerdo ambicioso, uno que detenga y revierta la pérdida de la naturaleza para el año 2030 y al mismo tiempo nos ayude a conservar el 30% de las tierras, los océanos y los ecosistemas de agua dulce a nivel mundial, objetivo conocido como 30 por 30. También debe exigir reducir a la mitad nuestra huella global de producción y consumo; abordar los principales impulsores de la pérdida de la naturaleza; y movilizar nuevos e importantes recursos para apoyar los objetivos del marco, incluso mediante la redirección de subsidios perjudiciales para ayudar a la naturaleza. Todo esto debe hacerse utilizando un enfoque inclusivo basado en los derechos que involucre a toda la sociedad, las comunidades locales y los pueblos indígenas.

Si bien Estados Unidos sigue siendo uno de los pocos países que no ha ratificado el Convenio sobre la Diversidad Biológica, ha adoptado medidas importantes para proteger la naturaleza tanto dentro del país como en todo el mundo. En particular, la administración Biden ha lanzado varias iniciativas importantes en los últimos dos años para alinear a Estados Unidos con muchos de los objetivos que se persiguen en este momento en las negociaciones de un nuevo Marco Global de Biodiversidad. Estas son algunas de las formas en las que el país está adoptando medidas:

1) La hermosa América

La iniciativa America the Beautiful establece una meta nacional para conservar el 30% de la tierra y agua de Estados Unidos para el 2030, alineada a la meta global de 30 por 30. Hace énfasis en apoyar las iniciativas dirigidas localmente y una combinación de áreas protegidas y otras medidas de conservación efectivas, trabajando en cooperación con las comunidades, las naciones nativas y aquellos que administran las tierras y aguas para la producción, incluyendo los propietarios privados, los silvicultores y los pescadores.

2) Plan de Estados Unidos para conservar los bosques mundiales

Esta iniciativa, anunciada durante las negociaciones internacionales sobre cambio climático de 2021 en Glasgow, busca proteger los bosques y otros ricos ecosistemas en carbono, incluso detener la deforestación mundial y el comercio ilegal de madera. En apoyo al plan, el presidente Biden se comprometió a movilizar $9 mil millones de dólares para el 2030, junto con compromisos similares de otros países.

3) Orden Ejecutiva del Día de la Tierra 2022

En el Día de la Tierra de este año, el presidente Biden firmó una orden ejecutiva que ordenaba a la administración tomar una serie de medidas para abordar la pérdida de la naturaleza y promover la conservación de la biodiversidad. Algunas de estas medidas se centran en la protección de los bosques de Estados Unidos y de todo el mundo. Otros exigen la creación de un sistema para medir y contabilizar el valor económico de la naturaleza, así como una hoja de ruta para usar soluciones basadas en la naturaleza que ayuden a combatir el cambio climático, mismas que se implementaron recientemente. Las soluciones basadas en la naturaleza son una herramienta fundamental para conservar la biodiversidad y, al mismo tiempo, reducir las emisiones de carbono y fortalecer la resiliencia de las personas y los ecosistemas ante los impactos del cambio climático.

Todas estas acciones de la administración hacen que Estados Unidos camine en la dirección correcta y lo alinean con los objetivos que se buscan bajo un nuevo Marco Global de Biodiversidad. Pero aún queda mucho por hacer, incluso garantizar que los países en desarrollo tengan los recursos que necesitan para proteger la rica biodiversidad dentro de sus fronteras. Esta es un área en la que Estados Unidos puede y debe continuar liderando, específicamente aumentando el financiamiento de la asistencia extranjera para los programas internacionales de conservación. En el período previo a las negociaciones en Montreal, varios países desarrollados se comprometieron a aumentar la cantidad de asistencia que brindan. En Estados Unidos, el Congreso juega un papel clave en lo que respecta a estos niveles de financiamiento, y actualmente está trabajando para finalizar sus proyectos de ley de gastos anuales antes de fin de año.

El mundo se está dando cuenta de la crisis de la naturaleza, su conexión con el cambio climático y las amenazas que representa para la vida humana y los medios de subsistencia. Más de 90 líderes mundiales han respaldado un “compromiso de líderes por la naturaleza”, pidiendo compromisos globales para detener y revertir la pérdida de biodiversidad para el 2030. Pero las palabras contundentes deben ir acompañadas de acciones contundentes. Y ante tantas especies al borde de la extinción, el mundo debe actuar ahora mismo.