Amamos los tigres silvestres y no queremos perderlos

A medida que nos acercamos al 2022, la atención del mundo nunca antes había estado tan centrada en los tigres. Se espera que el 2022, también conocido como el Año del Tigre en el calendario lunar chino, sea una coyuntura crítica en el recorrido a futuro en torno a la conservación de los tigres. Durante el último Año del Tigre, en 2010, se llegó a un compromiso global para duplicar la población de tigres en el mundo, meta conocida como Tx2, el esfuerzo de recuperación más ambicioso del mundo jamás llevado a cabo alrededor de una sola especie.

Las poblaciones de tigres han ido disminuyendo en Asia durante más de 100 años, incluso se han registrado extinciones debido a la caza furtiva y la pérdida de hábitat. Asegurar un futuro para los tigres no solo implica salvar a una especie emblemática. Si los tigres prosperan en la naturaleza es un indicador de que los ecosistemas en los que viven también están prosperando. Hemos visto gran progreso en muchos de los 13 países que comprenden el área de distribución de los tigres, mismos que se han comprometido a tomar medidas. Debido al apoyo político, el financiamiento, la colaboración y la innovación, las poblaciones de tigres ahora están aumentando en países como India, Nepal, Bután, China y Rusia. Sin embargo, las amenazas hacia los tigres siempre están presentes. Más recientemente, en el sudeste asiático, una crisis ocasionadas por trampas de lazo ha estado acabando con la vida silvestre de los bosques. Además, estas trampas han contribuido con la extinción de los tigres en Camboya, Laos y Vietnam. La yuxtaposición de los espacios naturales y los dominados por los humanos significa que el conflicto entre las personas y los tigres sigue siendo una amenaza importante para los tigres silvestres. Además, el tráfico ilegal de vida silvestre también ha propiciado la extinción de los tigres, problema que se ha agudizado debido a la proliferación de granjas de tigres. Estas granjas, que se estima cuentan con más de 8,000 tigres en cautiverio en China, Laos, Tailandia y Vietnam, a su vez alimentan el comercio ilegal y estimulan la demanda.

¿Dónde hay esperanza para los tigres?

Si bien los tigres atraviesan por una crisis en el sudeste asiático continental (solo Indonesia, Malasia, Birmania y Tailandia actualmente tienen poblaciones de tigres silvestres), el número de tigres está aumentando en áreas como Bután, China, India, Nepal y Rusia, países que han logrado importantes avances en sus esfuerzos por conservar a los tigres.

India, hogar de más del 60% de los tigres del mundo, está estableciendo el estándar de oro para la conservación del tigre con el anuncio de que 14 nuevos sitios han sido aprobados bajo CA | TS, los estándares de conservación asegurada para los tigres (un sistema de clasificación unificado para el manejo de áreas protegidas basada en las mejores prácticas internacionales para la gestión de especies y lugares objetivo), mientras que todas las reservas de tigres en la India también son ahora sitios registrados por CA | TS. La conservación del tigre también ha tenido más éxito en países como Nepal, donde se han creado comités nacionales de tigres presididos por los jefes de gobierno para elevar el perfil político de los tigres. Ciertas áreas de Bután están registrando ahora los primeros avistamientos de tigres: en la División Forestal de Samtse se avistó un tigre macho adulto por medio de cámaras trampas a una altura de 2,775 metros sobre el nivel del mar, lo que ahora significa que se han registrado tigres en cada distrito del país. Incluso se han registrado avistamientos a gran altitud en Nepal. El Parque Nacional Land of the Leopard, en Rusia, ahora funciona como un corredor de vida silvestre y ruta principal para que los tigres encuentren y establezcan nuevos territorios, y los censos recientes del parque han revelado que su población de tigres se ha triplicado.

También existen importantes oportunidades para la recuperación de los tigres en el sudeste asiático. Tailandia tiene el hábitat contiguo de tigres más grande y la mayor densidad de guardabosques de la región. La dispersión documentada desde el Santuario de Vida Silvestre Huai Kha Khaeng hacia otras áreas protegidas en Tailandia y a través de la frontera hacia Birmania es prueba de estos recursos y de una sólida gestión de áreas protegidas en el entorno. Y el patrullaje contra la caza furtiva, liderado por miembros de la comunidad indígena en el Complejo Forestal Belum Temengor de Malasia, ha dado como resultando una reducción del 99% en las trampas de lazo en los últimos años.

Oportunidades para la recuperación del tigre en el sudeste asiático

Sabemos que los tigres pueden recuperarse en la naturaleza en el sudeste asiático. Pero se necesitan fuertes compromisos de los gobiernos para que den prioridad al futuro de los tigres. Existe una necesidad urgente de que los líderes desarrollen y respalden un plan de acción regional en la Cuarta Conferencia Ministerial de Asia sobre la Conservación del Tigre, que se prevé se celebrará en el otoño de 2021 en Malasia.

Los gobiernos del sudeste asiático tienen la oportunidad de revertir la disminución del número de tigres respaldando un nuevo plan de acción para la recuperación de tigres del sudeste asiático. Este plan debe abordar la necesidad de aumentar el presupuesto de las áreas protegidas, la dotación de personal y una mayor atención política y supervisión de la recuperación de los tigres. También deberá identificar sitios para la reconstrucción que puedan apoyar a los tigres y hacer frente al tráfico ilegal de tigres y partes de tigre, incluso de las granjas de tigres. Este extraordinario momento político para los tigres en la región y la adopción de un plan de recuperación de este tipo enviarían un mensaje: que los gobiernos del sudeste asiático están decididos a abordar la crisis.

Restaurar las poblaciones de los tigres silvestres es posible. Con el apoyo total de las comunidades, los gobiernos, el sector privado y los socios conservacionistas, se pueden eliminar las amenazas contra los tigres. De lo contrario, este gran felino seguirá amenazado incluso después del 2022.