Conclusiones clave de la cumbre climática COP28 en Dubái

Después de intensas negociaciones, la cumbre climática de la ONU acuerda una transición de los combustibles fósiles, pero no una eliminación total.

Tras días de intensas negociaciones surgió un acuerdo histórico de la cumbre climática de la ONU en Dubái, que representa un importante paso para abordar la crisis climática.

Por primera vez en la historia, el acuerdo pide explícitamente a todas las naciones que abandonen los combustibles fósiles, un paso crucial para frenar las emisiones de gases de efecto invernadero y limitar el calentamiento global.

Si bien el acuerdo no llegó a pedir explícitamente una eliminación gradual de los combustibles fósiles, una medida que muchos gobiernos esperaban, reconocer la necesidad de alejarse de estas contaminantes fuentes de energía representa un cambio significativo en la diplomacia climática global.

El texto reconoce claramente la urgencia de la situación y afirma que son esenciales las "reducciones profundas, rápidas y sostenidas" de las emisiones para evitar las devastadoras consecuencias de superarse el umbral de calentamiento de 1.5 °C establecido por el Acuerdo de París.

Este nuevo reconocimiento de la necesidad de abandonar los combustibles fósiles es un testimonio del creciente consenso global sobre la urgencia de la crisis climática.

Es una señal de que incluso frente a inmensos desafíos e intereses creados, las naciones pueden unirse para abordar esta amenaza existencial. Ahora los países deben convertir este acuerdo en acciones.

Esto requerirá un gran aumento del financiamiento climático para desbloquear estas acciones.

Los países desarrollados deben proporcionar el financiamiento necesario para garantizar que todos los países puedan descarbonizar y restaurar la naturaleza rápidamente.

A pesar de estos desafíos, el acuerdo alcanzado en la COP28 es un paso en la dirección correcta, ya que indica la voluntad de las naciones de reconocer la gravedad de la situación y tomar medidas para abordarla.

El primer Balance Global revela que estamos fuera de ruta

El mundo no está en camino de cumplir el objetivo de limitar el aumento de las temperaturas a 1.5 °C, por encima de los niveles preindustriales. Esta fue la cruda conclusión del primer Balance Global (GST, por sus siglas en inglés), realizado en la COP28, la 28ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

El GST, una evaluación integral de las acciones climáticas a nivel global, reveló que los compromisos nacionales actuales para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero son lamentablemente inadecuados.

Para mantenernos dentro del objetivo de calentamiento de 1.5 °C, para el año 2030 las emisiones globales deben reducirse en un 42% por debajo de los niveles de 2010. Sin embargo, las NDC actuales nos encaminan hacia una reducción de solo el 14%.

El GST sirvió como un recordatorio aleccionador de la urgencia de las acciones climáticas.

El mundo se está acercando rápidamente a un punto de no retorno por lo que debemos tomar medidas inmediatas y drásticas para evitar los peores impactos del cambio climático.

El resultado del GST es un llamado a la acción para que todos los países, empresas e individuos intensifiquen sus esfuerzos y trabajen juntos para lograr un futuro sostenible.

¿Cuál es la valoración de WWF?

WWF acoge con satisfacción la decisión de los países de abandonar los combustibles fósiles, pero está decepcionado por el hecho de que no se hayan comprometido a una eliminación total.

WWF pide una mayor ambición e implementación de las acciones climáticas, destacando la necesidad de transformar los sistemas energéticos y reemplazar los combustibles fósiles con energías renovables limpias y más baratas a una velocidad y escala sin precedentes.

El WWF también pide más financiamiento para ayudar a las personas en peligro y medidas para proteger la naturaleza.