WWF: COP29 cierra con un débil acuerdo financiero, que supone un revés para las acciones climáticas

Bakú, Azerbaiyán.- El resultado de la conferencia climática COP29, que cerró este fin de semana, amenaza con retrasar las acciones climáticas en un momento crítico en el que acelerar los esfuerzos es imprescindible. Después de dos semanas de negociaciones tensas y polarizadas, los países acordaron un acuerdo de financiamiento climático que está lejos de satisfacer las necesidades de los países en desarrollo. Además, esta COP no logró enviar un mensaje contundente sobre la urgencia de reducir rápidamente las emisiones y abandonar los combustibles fósiles.

Manuel Pulgar-Vidal, líder global de Clima y Energía de WWF y presidente de la COP20, declaró: "El mundo ha sido defraudado por este débil acuerdo de financiamiento climático. En este momento crucial para el planeta, este fracaso amenaza con retrasar los esfuerzos globales para enfrentar la crisis climática y dejar a las comunidades vulnerables expuestas a una creciente ola de desastres climáticos. Es un golpe serio a la acción climática, pero no debe frenar las soluciones que el mundo necesita desesperadamente”.

La ciencia sigue siendo clara: debemos acelerar la acción en esta década para evitar que el cambio climático se salga de control. Todos los líderes nacionales y corporativos tienen la responsabilidad de superar los límites de este acuerdo y proporcionar los niveles de financiamiento necesarios para impulsar los cambios transformadores que requerimos. Este mal acuerdo no puede detenernos. Debemos invertir en nuestro futuro colectivo”, agregó.

“WWF continuará trabajando para fortalecer este proceso multilateral, que ya ha demostrado su resiliencia, para que pueda entregar los resultados que el mundo necesita”, puntualizó Manuel Pulgar-Vidal.

Esta misma semana, los líderes del G20 reafirmaron la necesidad de aumentar drásticamente el financiamiento climático, pasando de miles de millones a billones. Sin embargo, el compromiso de US$300 mil millones anuales para 2035 no alcanza esta ambición, llega demasiado tarde y no se alinea con las necesidades urgentes de los países en desarrollo.

En el último momento, se añadió al texto una hoja de ruta para aumentar el financiamiento hacia $1.3 billones para los países en desarrollo, pero esto ofrece poca confianza en que se alcanzará ese nivel de financiamiento. La próxima presidencia brasileña de la COP30 de clima tendrá que gestionar este proceso con la participación de todas las partes para alcanzar un resultado significativo en la conferencia climática que se llevará a cabo en Belém en noviembre de 2025, asegurando que se movilicen recursos significativos.

Fernanda Carvalho, líder de Políticas Globales de Clima y Energía de WWF, afirmó: "En un año en el que los países deben decidir sus nuevos planes climáticos nacionales, es inaceptable que la COP29 no envíe un mensaje claro sobre la necesidad de reducir emisiones y eliminar los combustibles fósiles, respaldado por un financiamiento adecuado. Los países no deben permitir que este lamentable resultado desvíe la atención de la urgente necesidad de aumentar sus objetivos de reducción de emisiones, avanzar en la transición energética y adaptarse a las consecuencias del aumento de temperaturas. A menos que los países desarrollados vayan mucho más allá de esta meta financiera y hagan tangible la hoja de ruta de Bakú a Belém para los $1.3 billones, las comunidades vulnerables estarán cada vez más expuestas a impactos climáticos devastadores, y la ventana para limitar el calentamiento global a 1.5 °C se cerrará.”

Vanessa Morales, experta sénior en Clima y Naturaleza de WWF, añadió: "A pesar de que el clima y la naturaleza están intrínsecamente conectados, las negociaciones enviaron señales débiles sobre la necesidad de acelerar la acción en ambos frentes de manera paralela. La naturaleza tuvo una presencia destacada en eventos paralelos e iniciativas relacionadas, pero al no estar incluida formalmente en las negociaciones, corremos el riesgo de que este elemento crucial de la acción climática quede relegado. El clima y la naturaleza deben avanzar de la mano si queremos garantizar un planeta vivo para las generaciones futuras.”