Siguiendo los pasos de los pingüinos de Adelia en la Antártida

WWF está trabajando con expertos franceses en la estación Dumont D’Urville, en el este de la Antártida, para monitorear la vida de los pingüinos de Adelia.

La situación en la Antártida puede cambiar rápidamente 

La crisis climática es compleja. La desaparición del hielo marino representa una amenaza para los pingüinos pero la especie de Adelia en el este de la Antártida se ha visto afectada por todo lo contrario: la extensión del hielo marino creció, alejando la costa de sus zonas de alimentación. Esto significa que ahora tienen que viajar durante más tiempo para conseguir alimento así como para regresar.

Durante el crítico período de crianza de los pequeños pingüinos, una serie de días de heladas lluvias –algo inusual en lo que oficialmente se considera como un desierto polar- tuvo consecuencias catastróficas. Ya que las suaves plumas de los polluelos no son impermeables, lamentablemente ni un solo polluelo, de una colonia de 30,000 parejas adultas, logró sobrevivir la temporada de reproducción 2013-2014.

Nuestro trabajo

Estamos trabajando con expertos franceses en la estación Dumont D’Urville en el este de la Antártida; apoyamos importantes investigaciones del CNRS, el Programa Antártico Francés; y estamos monitoreando los hábitos de alimentación de los pingüinos mediante el uso de dispositivos GPS en miniatura que se instalan mientras las hembras están incubando con el fin de rastrear sus movimientos e identificar "puntos críticos biológicos" en el Océano Austral donde se alimentan.

Juntos estamos tratando de predecir cómo los pingüinos de Adelia podrían adaptarse al cambio climático. Además, apoyamos firmemente una propuesta internacional para crear un área marina protegida a gran escala para salvaguardar sus áreas de alimentación en el este de la Antártida.

Conoce a los pingüinos