Tatyana Minenko, líder del equipo de patrullaje de osos polares
- Fecha: 26 enero 2021
- Autor: Dmitry Ryabov, WWF-Russia
En el pueblo costero de Ryrkaipiy, en Chukotka, Rusia, la vida silvestre es la que tiene el control. En lugar de las personas, los osos polares son los verdaderos dueños.
El hielo marino del que dependen los osos polares va desapareciendo año con año como resultado de la crisis climática, obligando a estos animales a internarse tierra adentro en busca de alimento. Esta situación se ha convertido en un espectáculo cada vez más común en las comunidades del Ártico, generando un mayor conflicto con la gente.
Cada otoño, el equipo de patrullaje de osos polares de Ryrkaipiy, con el apoyo de WWF-Rusia, trabaja para proteger a la comunidad y prevenir los conflictos entre los humanos y la vida silvestre. Tatyana Minenko ha liderado el equipo de patrullaje desde 2006. Fue entonces cuando la crisis climática ocasionó que los conflictos en su aldea aumentaran.
En Ryrkaipiy, las morsas se congregan cerca de la aldea cada otoño, atrayendo hacia ellas a los osos polares. Las morsas del Pacífico adultas utilizan el hielo marino como plataforma para descansar y dejar a sus crías cuando se sumergen en busca de comida. Dado que el hielo marino se ha ido alejando hacia el norte y ya no llega a las áreas de alimentación de las morsas, estos animales se ven obligados a reunirse en la costa, más cerca de las personas. El área que rodea a Ryrkaipiy se ha convertido en el punto de encuentro más occidental para las morsas del Pacífico. En ocasiones, llegan a reunirse decenas de miles.
Las morsas se congregan en una pequeña península llamada cabo Kozhevnikov (a un paso del pueblo de Ryrkaipiy), conocida por los lugareños por la gran cantidad de osos polares que llegan a cazar morsas.
Estas grandes conglomeraciones de morsas son extremadamente abarrotadas y pueden ser peligrosas si los humanos se acercan demasiado. Un ruido fuerte puede asustar a los animales, causar pánico, provocar una estampida y como consecuencia la desafortunada muerte de las morsas, sobre todo de sus crías. Cuando esto sucede, los osos polares son atraídos a la zona por los cadáveres de las morsas. Es importante trasladar estas fuentes de alimento lejos de la aldea para mantener a los habitantes locales a una distancia segura de los animales; aquí es donde interviene el equipo de patrullaje de osos polares. Para reubicar a cualquier morsa muerta fuera de la comunidad, Tatyana consigue equipo y camiones de las autoridades locales. Trabajando junto con voluntarios y apoyados por el gobierno local y WWF, el equipo puede reubicar los cadáveres de las morsas de manera segura para alejar a los osos polares de la comunidad de Ryrkaipiy.
PREPARATIVOS PARA LA LLEGADA DE LAS MORSAS
Para el equipo de patrullaje, el otoño es la temporada de mayor trabajo; la llaman su "temporada de osos". Durante esta temporada de osos, Tatyana inspecciona la península casi todos los días, lleva un registro de las morsas y los osos que ve y acompaña a uno que otro turista.
“Informamos a la gente que hay una gran conglomeración y les pedimos a todos que no se acerquen, que no manejen cerca para no asustar a los animales y así evitar sembrar el pánico entre las morsas. También invitamos a otros habitantes locales a inscribirse como voluntarios para ayudar a proteger las congregaciones. Alertar es bueno, por supuesto, pero aún se necesita un monitoreo constante. Es importante para nosotros minimizar las estampidas de animales hacia el agua”, comenta Tatyana.
Pero a medida que pasan los años y la crisis climática empeora, la temporada de osos del equipo de patrullaje se expande, extendiéndose hasta los meses de invierno. De hecho, hace un año se vieron casi 60 osos deambulando por el cabo Kozhevnikov. Gracias a los diligentes esfuerzos del equipo de patrullaje de osos polares, la comunidad de Ryrkaipiy logró sobrevivir sin que ninguna persona y ningún oso sufrieran daños.
ENTRENAMIENTO DE SEGURIDAD ANTE OSOS POLARES
Tatyana también es una estrella en la escuela local. Todos los años se reúne con los niños y habla sobre la seguridad de los osos polares. Es inevitable que los niños de la comunidad se topen de frente con un oso polar; deben estar preparados y saber cómo reaccionar. Las lecciones de Tatyana son sencillas para que los niños puedan recordar fácilmente qué hacer. Les enseña a los estudiantes que es mejor caminar en grupo por el pueblo y siempre estar atentos de los alrededores.
Tatyana también explica que huir de un oso polar es peligroso, ya que el oso polar puede entrar en modo de caza. La lección siempre termina con dos puntos clave que todos los niños pueden recordar: retirarse lentamente y asustar al oso con un grito o incluso un rugido, el cual ella deja que los estudiantes practiquen al final de cada entrenamiento.
EL EQUIPO DE PATRULLAJE HOY EN DÍA
Siguiendo el modelo del equipo de Tatyana, este año se estableció otro equipo de patrullaje para ayudar a mitigar el conflicto entre los humanos y la vida silvestre en otra comunidad: la aldea de Billings, ubicada a lo largo del mar de Chukchi y a unas 120 millas (193 km) al oeste de Ryrkaipiy. WWF brinda apoyo a este nuevo equipo y apoya los esfuerzos en curso para conservar los lugares y las especies silvestres mientras ayuda a las comunidades locales.
En Ryrkaipiy, Tatyana y su equipo están más ocupados que nunca pero también están mejor equipados para patrullar la zona. Este año, con la ayuda de WWF-Rusia, el equipo de patrullaje consiguió un ATV y una motonieve propios, lo que facilita mucho las labores de patrullaje.
- Temas relacionados: